lunes, 16 de marzo de 2009

El arte de vivir: Dolly Wilde



En ocasiones las vidas más fascinantes e ilustres tienen una sombra demasiado alargada bajo la que se cobijan las de sus conocidos o familiares. En el caso de nuestro personaje de hoy, podemos decir que Dolly Wilde (1895-1941) fue digna sobrina de su tío Oscar Wilde.

Wilde, el dandy que inventó un modo de comportarse, que buscaba adornos para su Salomé en los escaparates de todas las capitales europeas y que dejó una obra literaria breve e inagotable, fue encarcelado y, meses después, nació su sobrina Dolly. Desde muy joven se hizo conocida en los salones literarios de Londres y París, donde destacó como una magnífica conversadora. Antes había sido conductora de ambulancias voluntaria en el París de la Primera Guerra Mundial, donde trabó amistad con sus futuras compañeras de salón. Fiel a las enseñanzas de tío Oscar, prefirió dedicar todas sus fuerzas a la vida social, descuidando una carrera literaria que, según muchos, habría podido brillar con luz propia.

Sin embargo, Dolly Wilde fue más conocida por sus flirteos y romances con lo más granado de la intelectualidad, principalmente femenina, de la época. Fue una de las amantes de Natalie Barney, dueña de un importantísimo y muy vanguardista salón literario. Fue ésta una relación tormentosa y siempre compartida con terceros amantes que marcó profundamente a Dolly. También era conocida su afición al alcohol, a la heroína y a los somníferos, que la llevaron en más de una ocasión a distintas clínicas en intentos frustrados de rehabilitación.

De este modo, Dolly seguía la ruta de su ilustre familiar. Había heredado del escritor ciertos rasgos físicos, y supo imitar, para entusiasmo de otros artistas, la indumentaria y los modales del dandy. Sin embargo, como hemos comentado, no heredó su predisposición a la literatura: la única obra que dejó fueron sus cartas y su amistad con intelectuales como Cocteau, Isadora Duncan, Marguerite Yourcenar o Djuna Barnes, que la inmortalizó en El almanaque de las mujeres. Presa de sus adicciones, sus tendencias autodestructivas y suicidas y sus crisis nerviosas, apareció muerta en un hotel de Londres sin que las causas de su fallecimiento quedaran nunca claras.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Toma ya!! Una da ideas y otros la desarrollan jajajaj Molaría haber hecho más reflexión personal sobre este enigmatico personaje...
Un poco Wiki! SOrry!